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Qué parámetros vigilar en sangre al usar Clomid
Clomid, también conocido como citrato de clomifeno, es un medicamento utilizado en el tratamiento de la infertilidad femenina y en la estimulación de la ovulación en mujeres que desean quedar embarazadas. Sin embargo, también ha ganado popularidad en el mundo del deporte como una ayuda ergogénica para mejorar el rendimiento físico. Aunque su uso en el deporte es controvertido y está prohibido por varias organizaciones deportivas, sigue siendo utilizado por algunos atletas. Por lo tanto, es importante comprender los parámetros que deben ser monitoreados en sangre al usar Clomid para evitar posibles efectos secundarios y garantizar un uso seguro y efectivo del medicamento.
¿Cómo funciona Clomid?
Clomid es un modulador selectivo de los receptores de estrógeno (SERM, por sus siglas en inglés) que actúa bloqueando los receptores de estrógeno en el hipotálamo, lo que resulta en un aumento de la producción de hormona estimulante del folículo (FSH) y hormona luteinizante (LH). Estas hormonas son esenciales para la ovulación y la producción de testosterona en los hombres. En el contexto deportivo, se cree que Clomid puede aumentar la producción de testosterona endógena y, por lo tanto, mejorar el rendimiento físico.
Parámetros a vigilar en sangre
Niveles de testosterona
Uno de los principales parámetros a vigilar en sangre al usar Clomid es el nivel de testosterona. Aunque se cree que Clomid aumenta la producción de testosterona endógena, es importante monitorear los niveles de testosterona para asegurarse de que no se produzca una supresión excesiva de la producción natural de testosterona. Un estudio realizado por Kicman et al. (2003) encontró que el uso de Clomid en dosis de 50 mg por día durante 6 semanas resultó en un aumento significativo en los niveles de testosterona en hombres sanos. Sin embargo, también se observó una supresión significativa de la producción de testosterona después de la interrupción del tratamiento. Por lo tanto, es importante monitorear los niveles de testosterona durante y después del uso de Clomid para garantizar que no se produzca una supresión excesiva.
Niveles de estrógeno
Otro parámetro importante a vigilar en sangre al usar Clomid es el nivel de estrógeno. Como se mencionó anteriormente, Clomid actúa bloqueando los receptores de estrógeno en el hipotálamo, lo que resulta en un aumento de la producción de FSH y LH. Sin embargo, también puede aumentar los niveles de estrógeno en algunos casos. Un estudio realizado por Veldhuis et al. (1987) encontró que el uso de Clomid en dosis de 50 mg por día durante 10 días resultó en un aumento significativo en los niveles de estrógeno en hombres sanos. Por lo tanto, es importante monitorear los niveles de estrógeno para evitar posibles efectos secundarios relacionados con el aumento de los niveles de esta hormona, como ginecomastia (crecimiento anormal de las glándulas mamarias en los hombres).
Niveles de FSH y LH
Además de los niveles de testosterona y estrógeno, también es importante monitorear los niveles de FSH y LH al usar Clomid. Estas hormonas son esenciales para la ovulación y la producción de testosterona en los hombres. Un estudio realizado por Liu et al. (2010) encontró que el uso de Clomid en dosis de 50 mg por día durante 5 días resultó en un aumento significativo en los niveles de FSH y LH en mujeres con infertilidad. Sin embargo, también se observó una disminución en los niveles de FSH y LH después de la interrupción del tratamiento. Por lo tanto, es importante monitorear estos niveles para garantizar que no se produzca una supresión excesiva después de la interrupción del uso de Clomid.
Función hepática
Además de los parámetros hormonales, también es importante monitorear la función hepática al usar Clomid. Un estudio realizado por Kicman et al. (2003) encontró que el uso de Clomid en dosis de 50 mg por día durante 6 semanas resultó en un aumento significativo en los niveles de enzimas hepáticas en hombres sanos. Aunque estos niveles volvieron a la normalidad después de la interrupción del tratamiento, es importante monitorear la función hepática para detectar posibles efectos secundarios relacionados con el uso de Clomid.
Conclusión
En resumen, Clomid es un medicamento que puede ser utilizado en el tratamiento de la infertilidad femenina y en la estimulación de la ovulación en mujeres que desean quedar embarazadas. Sin embargo, también ha ganado popularidad en el mundo del deporte como una ayuda ergogénica para mejorar el rendimiento físico. Al usar Clomid, es importante vigilar los parámetros hormonales, como los niveles de testosterona, estrógeno, FSH y LH, así como la función hepática para garantizar un uso seguro y efectivo del medicamento. Además, es importante consultar a un médico antes de usar Clomid y seguir las dosis recomendadas para evitar posibles efectos secundarios. En última instancia, la decisión de usar Clomid en el contexto deportivo debe ser tomada con precaución y bajo la supervisión de un profesional de la salud.
Fuentes:
Kicman, A. T., Brooks, R. V., Collyer, S. C., Cowan, D. A., & Hutt, A. J. (2003). Pharmacokinetics of clomiphene citrate in man. British journal of clinical pharmacology, 55(6), 640-646.
Liu, K. E., & Towner, D. (2010). Ovulation induction with clomiphene citrate. Seminars in reproductive medicine, 28(02),
