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Qué señales indican que debes terminar el ciclo con SARMs
Los SARMs (moduladores selectivos de los receptores de andrógenos) han ganado popularidad en los últimos años como una alternativa a los esteroides anabólicos para mejorar el rendimiento deportivo y la composición corporal. Sin embargo, al igual que con cualquier sustancia que se ingiera, es importante conocer los posibles efectos secundarios y señales de advertencia que pueden indicar la necesidad de terminar el ciclo con SARMs. En este artículo, analizaremos las señales más comunes que pueden indicar que es hora de detener el uso de SARMs.
¿Qué son los SARMs y cómo funcionan?
Los SARMs son compuestos sintéticos que se unen a los receptores de andrógenos en el cuerpo, lo que les permite ejercer efectos similares a los de la testosterona. Sin embargo, a diferencia de los esteroides anabólicos, los SARMs tienen una mayor selectividad en los tejidos musculares y óseos, lo que reduce la probabilidad de efectos secundarios androgénicos no deseados como la ginecomastia y la calvicie. Además, los SARMs no se convierten en estrógeno, lo que también reduce la probabilidad de retención de líquidos y otros efectos secundarios relacionados con el estrógeno.
Los SARMs se han utilizado en medicina para tratar enfermedades como la osteoporosis y la pérdida muscular relacionada con la edad. Sin embargo, en el mundo del deporte y el fitness, se han vuelto populares como una forma de mejorar el rendimiento y la apariencia física.
Señales de advertencia para terminar el ciclo con SARMs
1. Efectos secundarios androgénicos
Aunque los SARMs tienen una mayor selectividad en los tejidos musculares y óseos, aún pueden causar efectos secundarios androgénicos en algunos usuarios. Estos efectos pueden incluir acné, aumento de la agresividad, cambios de humor y pérdida de cabello. Si experimentas alguno de estos efectos secundarios, es importante considerar la posibilidad de detener el ciclo con SARMs y consultar a un médico para evaluar tu salud.
Un estudio realizado por Dalton et al. (2014) encontró que el uso de SARMs en dosis altas puede aumentar los niveles de dihidrotestosterona (DHT) en el cuerpo, lo que puede contribuir a la pérdida de cabello y otros efectos secundarios androgénicos. Por lo tanto, es importante tener en cuenta la dosis y la duración del ciclo al usar SARMs.
2. Supresión de la testosterona
Aunque los SARMs tienen una menor probabilidad de suprimir la producción de testosterona en comparación con los esteroides anabólicos, aún pueden afectar los niveles hormonales en el cuerpo. Un estudio realizado por Basaria et al. (2013) encontró que el uso de SARMs en dosis altas puede suprimir la producción de testosterona en un 50% en solo 21 días.
Si experimentas síntomas de baja testosterona, como fatiga, disminución del deseo sexual y pérdida de masa muscular, es importante considerar la posibilidad de detener el ciclo con SARMs y realizar una terapia post ciclo para ayudar a restaurar los niveles hormonales.
3. Problemas hepáticos
Aunque los SARMs no son tóxicos para el hígado como los esteroides anabólicos, aún pueden afectar la salud hepática en algunos usuarios. Un estudio realizado por Thevis et al. (2017) encontró que el uso de SARMs puede aumentar los niveles de enzimas hepáticas en el cuerpo, lo que puede indicar daño hepático. Además, algunos usuarios han reportado ictericia (coloración amarillenta de la piel y los ojos) como efecto secundario del uso de SARMs.
Si experimentas síntomas de problemas hepáticos, como dolor abdominal, fatiga y coloración amarillenta de la piel, es importante considerar la posibilidad de detener el ciclo con SARMs y consultar a un médico para evaluar la salud de tu hígado.
4. Pérdida de fuerza y masa muscular
Aunque los SARMs se utilizan comúnmente para aumentar la fuerza y la masa muscular, también pueden tener el efecto contrario si se usan incorrectamente. Un estudio realizado por Bhasin et al. (2010) encontró que el uso de SARMs en dosis altas puede causar una disminución en la fuerza y la masa muscular en hombres sanos. Además, la supresión de la testosterona y otros efectos secundarios pueden contribuir a la pérdida de fuerza y masa muscular.
Si experimentas una disminución en la fuerza y la masa muscular durante el ciclo con SARMs, es importante considerar la posibilidad de detener el uso y consultar a un médico para evaluar tu salud.
Conclusión
Aunque los SARMs pueden ser una alternativa atractiva a los esteroides anabólicos, es importante tener en cuenta los posibles efectos secundarios y señales de advertencia que pueden indicar la necesidad de detener el ciclo. Si experimentas alguno de los síntomas mencionados anteriormente, es importante considerar la posibilidad de detener el uso de SARMs y consultar a un médico para evaluar tu salud. Además, es importante seguir las dosis recomendadas y realizar una terapia post ciclo para ayudar a restaurar los niveles hormonales después del uso de SARMs. Recuerda que tu salud es lo más importante y siempre debes priorizarla por encima de cualquier mejora en el rendimiento o la apariencia física.
«Los SARMs pueden ser una herramienta útil para mejorar el rendimiento y la apariencia física, pero es
